Veinte veintitrés
No estamos aún en marzo y el año parece haber empezado con todo. Cuántas cosas pasaron desde el primer día de enero hasta hoy. ¿Alguna vez se pusieron a observar todo lo que sucede durante un mes en nuestras vidas? La rutina nos suele ganar la pulseada y en muchas ocasiones no nos acordamos lo que hicimos ayer, pero que tan importante es prestarle atención al día a día para poder visualizar con mayor claridad los logros.
Durante el último mes, en las redes de Plushlamour, seguramente han visto cambios y sorpresas. Pero el público se renueva, diría la gran “Chiqui” Legrand, y si no vieron nada les cuento que la escuela se mudó. Sí, luego de meses de trabajo duro, largas jornadas y hasta incluso varios días sin dormir, puedo decir que finalmente ¡ESTAMOS MUDADOS!
“El nuevo” Plushlamour trae bajo el brazo la labor de doce años de construcción de la escuela como institución académica pero también autoconstrucción mía. Cuando cerré las puertas del emblemático Paraná 326, me encontré con un conjunto de sensaciones que obviamente no dejaron de traerme nostalgia. Hice un remind de todo lo vivido durante todos esos años y me encontré con crecimiento personal, superación académica, rostros de emoción de ex alumnos que se egresaron de las diferentes carreras que ofrece la escuela, trabajo en equipo constante y tantísimos proyectos que vi nacer en mi oficina.
Dicen que si hay nostalgia hay buenos momentos vividos, y eso lo tengo muy claro. Pero a veces, y más como emprendedora, me pega el “bichito” del ¿que vendrá luego de esto?, ¿qué hay en las afueras de lo ya conocido? Después de mucho tiempo pensando estos escenarios imaginarios en mi cabeza, creo que va más allá de los prejuicios o los miedos. Gracias a dios, pude darme cuenta, que lo que vendrá tiene que ver nada más y nada menos que con las historias que nos contamos y aquellas que nos trajeron hasta acá.
No es lo mismo “dejar atrás” que “atesorar fuerte los momentos vividos”. El nuevo espacio de Plushlamour no es más que tomar con sabiduría y experiencia todo lo cultivado hasta el momento en el antiguo edificio, para mantener con más fuerzas todo aquello que nos hizo llegar a ser lo que somos ahora: una comunidad académica, con fuertes valores humanos, que enseñan todos los días moda e imagen, pero con la mirada puesta en el otro.
Tomo al “nuevo” Plushlamour con la continuidad de siempre, pero reconociendo lo que capitalizamos juntos para seguir nutriéndonos entre todos y sumar un nuevo capítulo en la historia de Plushlamour.
Los espero a todos en Carlos Pellegrini 713, 1º piso, para vivir una experiencia totalmente diferente en materia de moda. Por algo Plushlamour es considerada una de las escuelas número uno a nivel LATAM, y eso no sólo es gracias a la institución, al valor humano que trabaja en la escuela y al contenido académico, sino también a los ex alumnos que hoy en día son grandes profesionales en el rubro de la imagen y la moda.
¡Gracias Paraná 326! Por tus buenas vibras y por todo lo que nos pusiste en el camino para ser lo que somos ahora.
