El protector solar es un esencial en nuestro neceser, no solo durante el verano, sino durante todo el año. Sin embargo, sigue generando numerosas dudas. ¿Cómo funciona realmente? ¿Qué significan los números del SPF? ¿Con qué frecuencia debemos reaplicarlo?

PlushMag te proporciona el manual de uso definitivo para aclarar todas esas preguntas sobre la protección solar.

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¿Cómo funciona el protector solar?

Los protectores solares funcionan gracias a los filtros solares que contienen. Existen dos tipos principales: filtros químicos y filtros minerales.

Filtros minerales: estos no penetran la piel y actúan como un espejo, reflejando la radiación solar. Por esta razón, suelen dejar una capa blanca visible sobre la piel, lo que vemos en realidad es luz reflejada. Son ideales para fórmulas pediátricas y para pieles sensibles.

Filtros químicos: estos penetran la piel y absorben la radiación solar, transformándola en calor. No dejan rastro visible y son preferidos en fórmulas que buscan alta cosmeticidad.

La combinación de filtros solares con antioxidantes es altamente beneficiosa. Los antioxidantes actúan como una defensa adicional, sacrificándose para proteger la piel de los daños que los filtros solares no pueden evitar por completo.

¿Qué significan los números del SPF?

El SPF, o Factor de Protección Solar, indica la capacidad del protector solar para proteger contra los rayos UVB, responsables de las quemaduras solares y el fotoenvejecimiento.

Por ejemplo, un SPF 50 permite que la piel permanezca 50 veces más tiempo expuesta al sol antes de quemarse, en comparación con la piel sin protección. Es importante recordar que la efectividad puede variar según el tipo de piel y las condiciones de exposición.

¿Cada cuánto tiempo debemos reaplicar el protector solar?

Las recomendaciones generales indican que se debe reaplicar el protector solar cada dos horas. Para las reaplicaciones durante el día, se recomienda usar fórmulas más ligeras, como brumas, polvos con SPF50 o sticks, que son fáciles de usar y no afectan el maquillaje.

Cómo escoger el protector solar ideal

Lo ideal es optar por productos con SPF50 o SPF50+ para minimizar la necesidad de reaplicación frecuente. Las fórmulas modernas han mejorado significativamente en cuanto a textura y comodidad, haciendo que los protectores solares de alto SPF sean adecuados para uso diario, no solo para la playa.

Al escoger un protector solar, considerá tu tipo de piel y tus necesidades específicas. Buscá productos que ofrezcan beneficios adicionales, como efectos matificantes, glow, seborreguladores o antirrojeces. Una buena formulación no solo protegerá tu piel del sol, sino que también mejorará su apariencia y salud general.

El uso correcto del protector solar es fundamental para proteger tu piel de los daños causados por la radiación solar. Entender cómo funcionan los diferentes tipos de filtros, la importancia del SPF y cómo reaplicarlo adecuadamente te ayudará a mantener tu piel saludable. Optá por productos bien formulados que se adapten a tus necesidades y recordá que la protección solar debe ser parte de tu rutina diaria durante todo el año.

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