La prenda de la abuela que arrasa en otoño-invierno 2025 y deja atrás a los sweaters oversize y camperas de jean

En el mundo de la moda, las sorpresas son moneda corriente, pero este otoño-invierno 2025 hay una protagonista que nadie vio venir: la clásica chaqueta de punto tejida, inspirada en aquellas prendas que solían habitar el guardarropa de nuestras abuelas. Este ítem nostálgico ha resurgido con una fuerza inesperada y se ha posicionado como el reemplazo predilecto de los sweaters oversize y las camperas de jean. Con aires románticos, detalles artesanales y una estética cozy pero pulida, las chaquetas de punto se han transformado en el nuevo símbolo del confort elevado a tendencia.

Texturas con historia y estética contemporánea

Lejos de ser una simple prenda retro, la chaqueta de punto se reinterpreta en 2025 con siluetas actualizadas, cortes más definidos y materiales de alta calidad que la llevan directamente de lo cotidiano a lo editorial. Las nuevas versiones apuestan por hilos gruesos, bordados artesanales, botones llamativos y paletas cromáticas suaves como el crema, el lavanda, el verde musgo o el marrón caramelo. El contraste entre lo tradicional del tejido y lo contemporáneo del styling convierte a esta prenda en un verdadero statement. Marcas de lujo como Miu Miu, Loewe o Jacquemus la han incluido en sus pasarelas, y el street style no ha tardado en seguir el ejemplo.

Cómo se lleva hoy: del sillón al street style

Uno de los puntos fuertes de esta prenda es su versatilidad. Las fashionistas la combinan con pantalones sastreros, faldas midi de cuero, denim recto y hasta con prendas deportivas. También se ha convertido en una capa ideal para llevar sobre tops minimalistas o vestidos lenceros, aportando un aire bohemio y elegante al mismo tiempo. El truco está en equilibrar el look con piezas actuales, jugando con accesorios contemporáneos como botas chunky, cinturones anchos o bolsos estructurados. Incluso en looks monocromáticos, estas chaquetas aportan dimensión y textura sin perder la armonía visual.

Además de ser tendencia, la chaqueta de punto conecta con una dimensión emocional de la moda. Para muchos, representa calidez, cuidado y una forma de vestir que prioriza el vínculo con lo artesanal y lo heredado. En tiempos donde lo sustentable y lo auténtico toman relevancia, estas prendas revalorizan el trabajo manual y celebran una moda con historia. El hecho de que muchas piezas provengan directamente del armario familiar o de tiendas vintage aporta una capa extra de significado. En 2025, vestir esta prenda es también un gesto de nostalgia y respeto por las raíces.

Prenda de abuela: el auge del “granny chic” como estilo dominante

Lo que comenzó como una microtendencia dentro del movimiento “granny chic” ha ganado tanto terreno que ya se perfila como uno de los estilos más influyentes de esta temporada. Lejos de ser un cliché, esta estética demuestra cómo lo que antes se consideraba “anticuado” puede resignificarse como sofisticado y atemporal. Las influencers y celebridades han adoptado este look con entusiasmo: desde capas tejidas en tonos pastel hasta conjuntos completos de punto, las redes sociales se han llenado de inspiración que confirma que esta prenda es mucho más que una moda pasajera.

La chaqueta de punto, esa prenda entrañable y funcional que muchos asociaban solo con la comodidad del hogar, se ha reinventado como la estrella indiscutida del otoño-invierno 2025. Al dejar atrás a los sweaters oversize y las clásicas camperas de jean, propone una forma de vestir más íntima, consciente y elegante. Porque si algo nos enseñó la moda reciente, es que lo que conecta con nuestras emociones y recuerdos siempre tiene un lugar privilegiado en el presente. Y en este caso, la prenda de la abuela ha sabido regresar para quedarse.

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